2016, año de la Responsabilidad Individual
Agosto 2016
Querid@s compañer@s miembros de OA:
El mes que viene hará 20 años que llegué a OA. Parece que fue ayer, pero cuando pienso en las cosas que he vivido me doy cuenta de que han dado para mucho. Desde el primer día me sentí en casa y pronto me di cuenta de que nunca podría devolver a OA lo que OA me daba a mí.
Para mí, el agradecimiento lleva consigo una responsabilidad. Además si OA estaba ahí para mí, yo debía estar ahí para OA. Esta es mi forma de entender mi responsabilidad individual como miembro de OA
Una custodio decía que ella no decía que no a ningún servicio. Yo, en mis modestas posibilidades pensaba igual y me gustó oírlo. Empecé a hacer servicio al mes y medio de llegar. Los dos primeros fueron como Vicetesorera y Vicedelegada de mi intergrupo. Pero, cosas de la vida, al mes acabé de servidora oficial de los dos.
Debo mi vida al servicio porque me ha mantenido en OA. He procurado hacer las cosas lo mejor que he podido y he hecho cosas que nunca pensé que podría hacer por mi carácter introvertido, tímido y una gran falta de confianza en mí misma. El servicio más cómodo para mí ha sido el de ratón de biblioteca: traducir. Empecé a hacerlo antes del año de estar en OA. Tímidamente, casi sin decir nada. Recuerdo que en una convención alguien preguntó, ¿De donde han salido estas traducciones? Y no me atreví a responder, alguien lo hizo por mí. Me daba miedo admitirlo porque pensaba que igual estaban mal. Tampoco me atrevía a enviarlas a la Oficina Mundial por el mismo motivo, hasta que una custodio me dijo que TENÍA que hacerlo.
Me planteé las traducciones como una forma cómoda para mí de pasar el mensaje. No hacía falta que me relacionara directamente con nadie. Pero dicen en OA que la vida empieza fuera de tu zona de comodidad.
Siendo una persona con miedo a volar y a la gente, he hecho servicios que me han hecho volar y reunirme con gente a la que no conocía o apenas conocía. Mis estudios de Filología Inglesa, que me hicieron sentirme frustrada durante años por no utilizarlos, aquí en OA se me ha dado la oportunidad de aplicarlos. Me han permitido incluso ir a Asambleas de la Región 9 y a la Conferencia Mundial como delegada nacional. Incluso fui secretaria de la Región 9. Dicen que Dios no elige a los cualificados sino que cualifica a los que elige. A mí me dio valor para decir sí y me apoyó en todo momento. No hubiera podido hacerlo sola. Hay servicios que cubrir en la Junta Nacional. ¿Por qué no vamos a la Convención y decimos SÍ a un servicio y cumplimos con nuestra responsabilidad individual? OA somos nosotros y nosotros hacemos que OA sea lo que es. Auto mantenernos no es solo contribuir económicamente. Nuestra contribución en el servicio forma parte de la Tradición Siete también.
En el amor y servicio de OA
Mcarmen, Presidente de la Junta Nacional