MIL – L@GROS

Revista nacional de recuperación

Número 12, Zaragoza diciembre de 2002.

¿OCURREN LOS MILAGROS?

Si estás leyendo este artículo, SI, ocurren los MILAGROS; porque es una alegría el trabajo, la buena voluntad y la constancia de nuestras compañeras que se esfuerzan para que esta revista llegue a nuestras manos.

–  Es un milagro que yo esté abstinente SOLO POR HOY

– Es un milagro que yo mantenga una pérdida de peso considerable

– Es un milagro que pueda escribir mi inventario diariosuitcase-1412996_640

– Es un milagro que esté trabajando y aplicando los pasos en mi vida.

– Es un milagro que haya cambiado mi actitud y haya superado miedos

 

* Miedo a relacionarme con personas autoritarias

* Miedo a equivocarme

* Miedo a la obsesión por la comida

* Miedo al futuro

* Miedo al propio miedo

 

– Es un milagro que yo esté trabajando mi ego, intentando cambiar mi orgullo por humildad.

– Es un milagro que aplique las tradiciones, no tan sólo en OA, también en mi vida.

– Es un milagro que haya superado resentimientos y haya cedido amablemente a las opiniones o actitudes de los demás.

– Es un milagro que tenga dos ahijadas comprometidas con el programa, de las cuales aprendo mucho, y a las que puedo ayudar.

– Es un milagro que haya dejado de hacerme la vida ingobernable SOLO POR HOY

– Es un milagro que no permita que otras personas me hagan la vida ingobernable SOLO POR HOY.

– Es un milagro que tenga serenidad y haya conocido la paz

– Es un milagro cuando mi mente enferma me dice: “come un dulce u otro alimento peligroso”, mi P. S. me da serenidad y valor para no tomar ese primer bocado compulsivo.

– Es un milagro que, cuando una y otra vez vuelven las obsesiones enfermizas a mi mente: ” come, te lo mereces”, o “no vales nada y no tienes fuerza de voluntad”, o ” pobrecita de mí! No merezco esto o lo otro” o “deberías haber hecho esto o aquello”, etc mi P. S. vuelve a hacer por mí lo que yo no soy capaz de hacer: me enseña a ACEPTAR todo esto como parte de mi enfermedad, me da VALOR para no ceder ante estos pensamientos y me regala SERENIDAD para continuar trabajando y aplicando este maravilloso programa de vida.

– Es un milagro que cuanto más agradecida estoy, mi corazón se inunda de calor amoroso de mi P. S.

– Es un milagro que haya aprendido a decir NO, sin rebelarme, sin odio, con dignidad.

– Es un milagro que yo escriba a la revista.

– Es un milagro que a veces, cuando mi ánimo flaquea, llegue por correo la revista Life line, la carta de una compañera o la llamada de otra persona pidiendo ayuda; esto hace que aumente mi fe en el P. S. y en el programa.

– Es un milagro que, a pesar de que se ha roto mi anonimato varias veces, continúe compartiendo con vosotros, aplicando los principios antes que las personas.

– Es un milagro que deje totalmente mi vida en manos de mi P. S., dejando de controlar, haciendo mi trabajo de a pie, confiando que los resultados llegarán en su horario no en el mío.

 

NO TE VAYAS ANTES DE QUE OCURRA UN MILAGRO

 

Os quiero, gracias por estar ahí